El Coaching es una Filosofía de vida.
El papel estelar es del individuo, él es el verdadero protagonista en su proceso de mejora y crecimiento personal continuo.
El Coaching Educativo plantea un cambio de paradigma, algo realmente necesario en el mundo actual y nos acerca conceptos fundamentales:
No concibe que el conocimiento está en el docente, sino en sus alumnos, éstos no son meros depositarios de información.
Propone una nueva metodología de enseñanza y una forma diferente de entender el concepto de aprendizaje. Se basa en procesos de aprender a aprender, con un modelo de docente no directivo.
Busca liberar el potencial de la persona para incrementar al máximo su desempeño, ayudarlo a aprender en lugar de enseñarle. Al pensar en esto me retrotraigo a mi juventud y recuerdo aquél caudal de información que me llegaba de cada docente y el esfuerzo de memorización que esto traía aparejado. Por lo general, salvo excepciones de algunos profesores, que recuerdo con mucho amor y agradecimiento, mi función no era la de pensar, crear, utilizar mis propias ideas y con crear con mis compañeros, sino memorizar. Luego de pasada la evaluación fría y objetiva, los conocimientos se caían. Únicamente retuve aquéllos aprendizajes significativos para mí, los que aprendí haciendo, los que descubrí en equipo y pude aplicar.
Considero que si les damos a los alumnos la posibilidad de pasar por el cuerpo los conocimientos y disfrutar del aprender, de comprender el para qué de los mismos, les será más fácil gestionar adecuadamente los cambios vertiginosos que se dan en el mundo de hoy. Hoy en día la información está al alcance de la mano; el papel docente no es transmitir información, sino ayudarlos a que ellos busquen la información pertinente, en los lugares adecuados. En el proceso de aprender a aprender desarrollarán la competencia necesaria para gestionar adecuadamente estos cambios y poder ser verdaderos protagonistas de sus aprendizajes.
El lenguaje genera realidad y crea nuevos paradigmas. Hay que mantener una actitud positiva y cuidar lo que decimos y lo que nos decimos para generar los cambios deseados.
El Coaching Educativo pretende transformar la sociedad a través de la mejora del Sistema Educativo.
Apuesta a un aprendizaje, no solo para obtener resultados académicos específicos, en áreas determinadas, sino para formar personas, en su amplio sentido de la palabra: críticas, reflexivas, responsables, que se adapten a los cambios.
Tiene en cuenta los procesos y las diferentes formas de aprender de las personas, los invita a descubrir y a potenciar sus talentos, habilidades y cualidades.
Pone el énfasis en la riqueza y el desarrollo de la capacidad humana. Atiende los paradigmas, modelos mentales, juicios, valores y creencias de las personas que componen el ámbito educativo y de esta manera mejora la calidad del sistema educativo, tanto en lo vincular: relaciones personales, como en lo académico: rendimiento.
El Docente
Coach a través de preguntas poderosas ayuda al alumno a que reflexione, a que revise sus creencias y encuentre sus propias respuestas, a ser proactivo y no reactivo. Da especial relevancia a los valores: dignidad, respeto, empatía, pensamiento crítico, responsabilidad, autonomía. No se enfoca únicamente en lo estrictamente académico, sino en lo relacional. Potencia contextos de aprendizaje asociativos y colaborativos entre los alumnos, ayuda al desarrollo de los actores que intervienen para sacar su máximo potencial y así alcanzar metas académicas, personales y profesionales. Tiene en cuenta la mediación de conflictos para poder vivir en armonía, ya que el ser humano es y se desarrolla en función de las interrelaciones psicosociales que establece. Si bien las competencias curriculares siguen siendo importantes, las competencias emocionales, intelectuales y relacionales toman un papel preponderante.
Luego de haber leído este artículo… ¿Crees que el Coaching es un buen aliado para la educación?
Aún queda mucho por recorrer… todos somos responsables de que estos cambios sucedan.